El pinzamiento tardío del cordón umbilical es una práctica que consiste en esperar unos minutos después del parto para cortar el cordón que une al bebé con la placenta. Su objetivo es permitir que el bebé reciba más sangre y células madre de la placenta, aportándole así una serie de beneficios para su salud y desarrollo.
¿Qué ventajas tiene el pinzamiento tardío del cordón umbilical?
Según la evidencia científica disponible, el pinzamiento tardío del cordón umbilical puede tener interesantes ventajas para el recién nacido:
- Mayor aporte de hemoglobina: el pinzamiento tardío puede aumentar los niveles de hemoglobina -la proteína que transporta el oxígeno en la sangre- en el bebé, lo que mejora su oxigenación y previene la anemia.
- Mayor aporte de hierro: el hierro es un mineral esencial para la producción de hierro y otras funciones vitales. El pinzamiento tardío puede incrementar las reservas de hierro en el bebé, lo que reduce el riesgo de anemia y favorece su desarrollo cognitivo y motor.
- Mayor aporte de células madre: retrasar el pinzamiento puede facilitar la transferencia de células madre de la placenta al bebé, lo que puede mejorar su capacidad regenerativa y reparadora ante posibles lesiones o enfermedades.
- Mayor peso al nacer: el pinzamiento tardío puede aumentar el volumen sanguíneo del bebé hasta un 50%, aportándole un mayor peso al nacer. Esto puede tener beneficios para su termorregulación, nutrición y crecimiento.
¿Qué desventajas tiene el pinzamiento tardío del cordón umbilical?
El pinzamiento tardío del cordón umbilical también puede implicar algunas desventajas o riesgos potenciales:
- Mayor riesgo de ictericia: el pinzamiento tardío puede aumentar los niveles de bilirrubina en el bebé, lo que puede acabar causando ictericia. La ictericia suele ser leve y se resuelve con fototerapia, pero en casos graves puede causar daños neurológicos.
- Mayor riesgo de policitemia: La policitemia es un aumento anormal del número de glóbulos rojos en la sangre. El pinzamiento tardío puede provocar policitemia en el bebé, aumentando su viscosidad sanguínea y dificultando su circulación. La policitemia suele ser asintomática y se resuelve espontáneamente, pero en casos severos puede causar problemas respiratorios, cardíacos o neurológicos.
- Mayor dificultad para atender al bebé: el pinzamiento tardío podría dificultar la atención inmediata al bebé en caso de que necesitara reanimación o cuidados especiales, sobre todo si el parto se realiza en una sala separada de la unidad neonatal. Este riesgo se puede reducir con una buena planificación y coordinación del equipo sanitario.
¿Qué implica el pinzamiento tardío del cordón umbilical para la extracción de la sangre de cordón?
La sangre de cordón es la sangre que queda en el cordón umbilical y la placenta después del parto. Esta sangre es rica en células madre que pueden usarse para tratar diversas enfermedades hematológicas o inmunológicas. La extracción de la sangre de cordón se practica a través de una punción en el cordón.
Aunque todavía no existen pruebas suficientes que apoyen o contradigan los posibles beneficios del corte tardío del cordón, instituciones médicas internacionales como la OMS o la Sociedad Americana de Obstetricia y Ginecología (ACOG) aconsejan realizar un pinzamiento tardío de cordón (entre 30-60 segundos) en todos los bebés sanos.
¿Y qué sucede cuando se quiere recoger la sangre del cordón umbilical? ¿puede impedir el pinzamiento tardío una correcta recogida?
No, se ha demostrado que -siempre que el retraso en el pinzamiento no supere los 60 segundos- esto no supone un inconveniente para el proceso de extracción de la sangre de cordón. En este caso, el impacto sobre la recolección de sangre de cordón umbilical de alto recuento del total de células nucleadas es muy reducido.
Manteniendo la salud del recién nacido y de la madre como prioridad, es perfectamente posible y deseable practicar un pinzamiento tardío, -con los beneficios que ello implica-, y realizar inmediatamente después una correcta recogida de sangre de cordón, que, en caso necesario, podría llegar a curar más 80 enfermedades oncohematológicas e inmunológicas.
